El Servicio Nacional del Patrimonio Cultural con la asesoría técnica de la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas y el patrocinio del Colegio de Arquitectos S.A.G y la Asociación de Oficinas de Arquitectos AOA; invitaron a participar del Concurso Anteproyecto Diseño Infraestructura Regional, Biblioteca, Archivo y Depósito de Colecciones Los Ríos, buscando seleccionar la mejor alternativa de diseño que proponga una arquitectura pública distintiva e icónica para la región y abra la discusión sobre la arquitectura contemporánea desde lo local.
En esta ocasión, la comisión evaluadora conformada por Nicolás Fernández en representación de Carlos Maillet; Paula Larraín; Emma de Ramón; Alan Trampe; Florencia Aninat; Emilio de la Cerda; Martín Urrutia; Adolfo Quiroz; Agustín Infante; José Domingo Peñafiel; Tirza Barría; Gabriela Avendaño y Albert Tidy en representación de los concursantes, seleccionó en 1° lugar la propuesta de Max Núñez y Stefano Rolla de Max Núñez Arquitectos Asociados; en 2° lugar a Martin Holmes Harvey y Jonathan Holmes Harvey; en 3° lugar a Ignacio Javier González Candia, Felipe Westermeier, Cristóbal Riffo, Rodrigo Fernández; y por último una mención honrosa a Javier Andrés Moya Ortiz; Pablo Rojas Böttner y Miguel Acuña.
Conoce a continuación, el primer premio en detalle.
1° Premio: Max Núñez y Stefano Rolla de Max Núñez Arquitectos Asociados
Texto cortesía de los Directores del Concurso Gonzalo Valderrama y Suilan Hau, de la Unidad de Proyectos de Inversión del SERPAT (Servicio Nacional del Patrimonio Cultural).
La propuesta recoge acuciosamente los aspectos técnicos de los programas solicitados: la vocación de “soporte” para la transferencia de conocimientos y flexibilidad de la biblioteca; el rol técnico y científico de los depósitos externos de colecciones y piezas culturales; y el papel social y de prestación legal que entrega el archivo regional.
A nivel urbano, la propuesta acentúa, a través de su escala y posicionamiento, la condición regional de la infraestructura y a Valdivia como una “ciudad humedal”, cuya conexión con el resto de la región, su vida e historia son indivisibles de sus ríos y humedales.
Ubicado en el histórico barrio “Plazoleta Berlín” (antes Barrio Estación) la Biblioteca, Archivo y Depósito externos Regional Los Ríos, tendrá como desafío ser un motor de reactivación del barrio, sus comunidades y de la relación entre ciudad y río en el sector.
Para lograrlo, la propuesta libera lo más posible el sitio en el nivel de la costanera Av. Arturo Prat para disminuir al mínimo la huella del edificio sobre el terreno natural. El edificio se suspenderá sobre grandes columnas y, de los 6.628 m2 de terreno, dos tercios se transforman en una gran plaza pública, que servirá como lugar de reunión y acceso principal a la biblioteca y al resto de los programas. Bajo la biblioteca se conformará un espacio público cubierto: un paseo protegido de la lluvia y el frío y conectado de manera fluida mediante escaleras y rampas públicas a las vías aledañas.
Con el objetivo que este acceso sea una “Plaza Humedal” y un ámbito de reunión de la cultura, el agua, la naturaleza fluvial de la ciudad y la actividad urbana; el paisajismo propone áreas húmedas y secas, con especies vegetales propias de los humedales de la zona, como voqui, totora, vatro; y árboles y arbustos nativos: arrayán, hualle, maqui, pitra, entre otros.
El edificio, se resuelve de forma sintética en tres partes distintas, pero interdependientes: la torre, la nave y zócalo; los que otorgarán correctamente la diferenciación de los controles de acceso y seguridad para programas y necesidades distintas, donde la suma de las partes genera un sólo conglomerado que provee el mejor resguardo posible del edificio y a su contenido cultural patrimonial.
La ubicación de los depósitos y archivos, en el centro del proyecto y en los pisos superiores de la torre, brindará a la piezas y documentos de valor patrimonial el mayor cuidado de acuerdo al principio de los 6 niveles de envoltura propuestos por el Serpat, sobre la base de las directrices técnicas del ICCROM y la gestión de riesgo.
La torre tiene un diseño simple compuesto por un esqueleto perimetral de marcos rígidos de hormigón que conforma una expresión neutra y estable. Esta estructura de pilares y vigas queda parcialmente vacía en sus 2 pisos superiores, otorgándole un remate ligero a la torre, y permitiendo que en el futuro se amplíen sobre esta estructura vacante nuevos depósitos sin interferir la arquitectura del conjunto.
Al costado sur poniente de la torre central, el núcleo de ascensores, montacargas y escalera aparece como un segundo elemento vertical de menor tamaño; un núcleo externo que permite circulaciones ventiladas y vistas de los espacios servidores y servidos.
En contraposición a la torre, la nave es un edificio unitario que contiene todo el programa público de la biblioteca regional, que se organiza como un anillo aéreo, en un solo nivel, ubicado en torno a la torre central y suspendido sobre grandes columnas diagonales de hormigón armado que se alzan 7.6 metros sobre el nivel de la plaza humedal. Esta horizontalidad unitaria del anillo permite que, un mismo elemento, escale correctamente el conjunto hacia calle Picarte y hacia el río Calle Calle.
Al interior, la planta permite una circulación perimetral fluida entre las distintas zonas que componen la biblioteca, un ambulatorio continuo, que al modo de un claustro, se puede recorrer sin interrupciones en torno al vacío que lo separa de la torre central. Esta continuidad espacial y flexibilidad permitirá a la biblioteca adaptarse a nuevos requerimientos en términos de programa y distribución. Igualmente, el rol del mobiliario será dar cabida a nuevas formas de lectura y de estudio; así como las distintas escalas y texturas de los revestimientos (hormigón, madera, textiles naturales) permitirán la convivencia de diferentes actividades y niveles de ruido.
La cubierta que genera superficies curvas, difunden la luz natural de manera controlada y minimizan la radiación directa, lo que permitirá que la biblioteca funcione con un bajo requerimiento de luz artificial disminuyendo el consumo de energía eléctrica.
Desde el punto de vista estructural, la forma de anillo y los pilares diagonales que “apuntalan” el volumen de la biblioteca, hacen analogía a las grandes embarcaciones que, estando en tierra, son suspendidas sobre puntales para hacerlas descansar en terreno seco, como ocurre en el cementerio de barcos y astilleros cercanos al sitio de proyecto. Así, la nave se asimila a una gran embarcación a la espera de zarpar por los meandros del Calle Calle hacia el Pacífico.
